Maximum, el nuevo 'espíritu' del jerez hecho brandy
Si la idea era la de relacionar el brandy Maximum —una nueva marca de brandy de Jerez, tanto tiempo después— con el viñedo, con su origen vínico, el sitio elegido para la presentación no podía ser otro: Viña Bristol, un auténtico mar de viñas enclavado en la barriada rural de Cuartillos. En 2015 Estévez dio a conocer que la apuesta de futuro de la empresa pasaba por dar un paso más en su compromiso con el consumidor y buscar productos diferenciados en los que la tierra, el viñedo —el origen, en definitiva— se convirtiera en la principal seña de identidad de la empresa en la búsqueda de la excelencia. Después de que por entonces sus marcas premium como La Guita, Tío Mateo o Tío Diego comenzaran a elaborarse con todo su líquido procedente del Marco de Jerez —incluido el alcohol vínico con el que se embotellan los vinos de Jerez y manzanillas para que alcancen los 15 grados reglamentarios—, Estévez redobla ahora la apuesta de su estrategia por la autenticidad y lo genuino con el lanzamiento del brandy Maximum, “elaborado cien por cien a partir de vinos de Jerez de uva palomino de nuestros viñedos”, en palabras del presidente de la empresa, José Ramón Estévez.
“El vino tiene que elaborarse a partir de buena uva y el brandy de un buen vino, como los de Jerez… Queremos poner el énfasis en el origen, en el terruño, en la variedad de uva, en nuestro viñedo, como hicimos hace años con nuestras marcas de vino”, dijo, recordando que desde hace más de dos años la empresa funciona internamente con sus principales marcas como si estuviera en una Denominación de Origen Calificada (DOC).
Estévez sitúa el lanzamiento de Maximum en el corazón de su storytelling, de la búsqueda de un relato propio. Desde su punto de vista, no se puede dudar de que Jerez tenga su historia, otra cosa es que, a la vista de los números de vino y brandy, “falta algo”, y estima que se trata de un relato en el origen y en la cultura que lo sustenta. “Ese relato solo puede estar basado en la viña, en lo genuino, en lo auténtico, en lo que yo llamo hacerlo bien desde el principio. Cognac, Armagnac, Burdeos o Champagne tienen esa historia basada en el origen. Para nosotros, que llevamos la innovación en nuestro ADN, no hay marcha atrás, esa es nuestra apuesta desde 2013 y pensamos que es el momento de que el sector coja ese camino, el del origen, para que todos, desde el viticultor al almacenista, obtengan rentabilidad”.
De aquí que Estévez califique al brandy Maximum como el nuevo “espíritu” de la bodega (juego de palabras por tratarse de una bebida espirituosa y un nuevo paso en la estrategia de la bodega). Si hasta ahora los principales argumentos de calidad del brandy de Jerez se han basado en la vejez, Estévez cree que ha llegado el momento de que la bebida y la denominación se reinventen y se supere la imagen “un tanto antigua” que proyecta, dando paso a factores como el de la elaboración 100% a partir de uva palomino de viñedos propios o la maduración en botas de roble que han contenido oloroso como principales señas de identidad (sin renunciar a tres años de crianza) de su nueva marca de brandy. “Hemos buscado la máxima calidad en todas las fases de Maximum sin hacer hincapié en su categorización por vejez [de hecho, no lo pone en su etiquetado]. No se le ha añadido azúcar, ni caramelo ni calor, solo lo que le hayan transmitido las botas de roble americano que han contenido oloroso. Hemos querido también darle un envasado más parecido al de un vino que al de un espirituoso, con un etiquetado en el que recalcamos su procedencia de palomino… Incluso proponemos que se consuma frío y mejor en copa de vino que en copa de balón. Buscamos interesar a la gente que consume bebidas espirituosas, claro, pero también a esa gente joven que se interesa por el vino. Bien, esa es la idea final: esto es vino, el espíritu del vino”, señaló.
José Ramón Estévez: "Si el brandy se aprovisionase en origen harían falta 3.700 hectáreas de viñedo"
José Ramón Estévez es un firme convencido de que Brandy de Jerez tiene que encaminar sus pasos a convertirse en una denominación de origen, aunque en realidad no le pone ningún nombre a su propuesta de que en el futuro el Marco de Jerez deba suministrar de materia prima también al brandy si quiere elaborar un discurso propio, diferenciado y genuino con el que buscar rentabilidad en un mundo global.
Según sus cálculos, a tenor de los actuales volúmenes que se mueven en el mercado, si las tres categorías de brandy de Jerez se elaborasen a partir de destilados de vinos a partir de uva procedente de la comarca, se necesitarían del orden de 3.700 nuevas hectáreas de viñedo, con lo que significarían de riqueza y empleo. Estévez reconoció que cuando se formuló Brandy de Jerez como denominación específica (finales de los 80) no podía ser de otra manera por los volúmenes que movían tanto el vino como el brandy, pero que hoy, tras la salida de las principales marcas de solera buscando ahorrar costes tanto por impuestos por como por materia prima, es perfectamente factible hacerlo en el futuro de una manera escalonada. “Pienso que está a huevo. Creo que el sector debe coger este camino. Para el brandy reserva y el gran reserva, cada día que pasa estamos perdiendo el tiempo. Vamos a ver, por poner un ejemplo, si en Escocia se rifan las sherry cask [botas envinadas en vino de Jerez que se destinan a criar whiskies]… no sé cómo el sector no lo ve, no ve el potencial que tenemos”, dijo el presidente de José Estévez SA.
También se manifestó a favor, en línea con otras voces del sector, de que el Marco de Jerez pudiese tener en el futuro una destilería que afianzara el tránsito de la uva a destilado de vino. Esa destilería sería la encargada de suministrar en origen holandas para el brandy y el alcohol vínico para el encabezado de vinos. Por último, lamentó que la Iniciativa Territorial Integrada (ITI) u otros fondos comunitarios no se hayan utilizado para sacar adelante este proyecto.